Mi Problema Con "Batman V. Superman"

Pasando desde referencias innecesarias o filosofía exagerada, descubrí que una cinta de este calibre sólo me proporcionaba angustias. Llegué a tolerarla al principio, víctima de la subjetividad, dejándome llevar por el infantil deseo de ver a dos de los iconos más importantes del mundo del cómic en la gran pantalla. Me gustaba su banda sonora, Me encantaba su fotografía, pero poco a poco, empecé a preocuparme por su guion, un manuscrito que ejecutaba el aclamado “Show Don’t Tell” al revés. Y es que creo haber averiguado cuál es mi problema con esta película.

Puedo resumirlo haciendo uso de dos personajes y una simple pregunta: ¿Por qué Bruce Wayne y Lex Luthor jamás entablaron una conversación sobre Superman? Lidiamos con una propuesta argumental que arroja un reflejo oscuro de uno de nuestros protagonistas (Bruce Wayne) en la forma de un antagonista (Lex Luthor). Esta técnica ya fue ejecutada en “Batman Returns”, y en esta ocasión, tenemos a dos personajes que utilizan su fortuna para construir un mundo mejor sin peligrosas amenazas como las que suponen alguien como Superman. Chris Terrio, el escritor, ignoró en activa y pasiva la necesidad de que ambos personajes charlasen cara a cara sobre el conflicto de la cinta (Superman), y solo los colocó frente a frente cuando este último ya había muerto, o para intercalar una breve conversación (Con Clark presente) sobre una potencial unión corporativa entre ambas empresas (Wayne Enterprises y LexCorp), una de las tantas referencias innecesarias de la cinta. Ahora, centrémonos en “Batman Returns” por un momento.

En ese universo, Batman es un héroe disfrazado de villano que combate el crimen tras el asesinato de sus padres, y El Pingüino es un villano disfrazado de héroe que combate la “injusticia” después de que sus padres lo arrojasen a las alcantarillas cuando era un bebé. El paralelismo se ha establecido, visual y argumentalmente. Bruce Wayne y Max Shreck hablan sobre ello. Bruce Wayne y Alfred Pennyworth hablan sobre ello. El Pingüino y Catwoman hablan sobre ello. El Pingüino y Gotham hablan sobre ello. El Pingüino y Batman hablan sobre ello. Y nosotros, el espectador, somos conscientes de ello porque somos testigos de sus conversaciones, que más que servir como homenajes a una historia ya existente, se encargan de desarrollar a sus personajes, sus personalidades, y la historia de cada uno. Esto no sucede en “Batman V. Superman”.

Oh sí, Bruce habla con Alfred Pennyworth sobre Superman. Bruce habla con Clark Kent sobre Superman. Pero Bruce no habla con Lex Luthor sobre Superman. Clark no habla con Lois Lane sobre Batman o Lex Luthor. Lex Luthor no habla con Metrópolis sobre Superman o Batman. Bruce no habla con Alfred Pennyworth sobre Lex Luthor. Perry White no habla. Metrópolis no habla sobre Lex Luthor. Superman no habla con Martha sobre Batman o Luthor. Martha y Lois no hablan sobre Superman, Batman o Luthor. ¿Me entiendes?

Esto, de paso, levanta otra pregunta que afecta en consideración a la película y sus personajes: ¿Lex Luthor presenció la batalla de Superman y Zod en Metrópolis? Una cinta de este calibre, tratando con los temas que trata, debería de asentar una obviedad tan obvia como esta. Oh sí, yo, el lector de tebeos, supongo que Luthor estaba allí, porque de lo contrario, ¿Cuál sería su motivación para odiar a Superman? El problema es que no lo sabemos, porque la película jamás contesta o analiza esa pregunta. Sólo tenemos la perspectiva de Bruce Wayne. ¿Pero qué hay de Luthor? ¿No es él acaso el antagonista de la cinta? ¿No merecemos ver su punto de vista?